SEGUIMIENTO DEL ENTRENAMIENTO
A la hora de conseguir buenos resultados con respecto a tu entrenamiento, es muy importante partir siempre desde un objetivo claro, que no siempre es aprobar de primeras las pruebas físicas de la oposición, sino que dependerá de diferentes factores individuales del opositor, como son:
- Antecedentes de lesión.
- Antecedentes de ejercicio físico previo.
- ¿Qué tipo de ejercicio realizaba con anterioridad?
- ¿Cuáles son sus capacidades físicas más potentes y cuáles las más débiles?
- Si tiene algún tipo de impedimento fisiológico que no le permita hacer ejercicio con normalidad, ya sea asma, diabetes, sobrepeso, etc.
- Plazos temporales.
- Edad, género, etc.
Una vez aquí, deberemos establecer objetivos a corto y medio plazo, para mantener la motivación del opositor y al mismo tiempo evaluar su mejora en cuanto a la fidelización al entrenamiento, ejecución técnica y marcas personales. ¿Por qué decimos esto? Porque en muchas ocasiones una misma metodología de trabajo no produce los mismos resultados en unos sujetos que en otros, por lo que deberemos de adaptarlo de forma lo más individual posible a cada opositor/a.
Para ello necesitamos realizar un seguimiento personalizado, para lo cual hoy en día hay muchos medios, ya sean hojas de Excel, papel, cronómetros, máquinas digitalizadas de gimnasios, encoders, plataformas de fuerza, entre otros muchos medios. Y además, llevar a cabo una recogida de datos de todos los entrenamientos de nuestros alumnos. ¿Qué datos nos pueden servir para ello? En el gimnasio, por ejemplo, podemos contar tanto las **repeticiones como las series, además del peso en 1RM** de las cargas a levantar.
En la pista de atletismo nos pueden servir tanto el n.º de series a realizar como los ritmos de carrera que lleva a cabo cada uno mediante un cronómetro, al igual que en la prueba del circuito de agilidad.
La recogida de todos estos datos nos permitirán acotar mucho más si el entrenamiento se está ejecutando correctamente, nos permitirá planificar de una forma mucho más específica y optimizar el rendimiento del opositor con la mayor eficiencia posible.
Además de esto, es recomendable llevar una ficha de marcas personales personalizada para que el opositor pueda mantener un foco mucho más concreto a la hora de mejorar en las pruebas, sabiendo en cuál de ellas deberá poner mayor empeño y esfuerzo.
